Existe una creencia común de que la diabetes es una enfermedad exclusiva de personas con sobrepeso. Aunque es cierto que el sobrepeso puede aumentar el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2, este no es el único factor, ni una “condena” automática para la enfermedad. Entonces, ¿por qué el exceso de peso está tan estrechamente relacionado con la diabetes? Para entenderlo, primero debemos ver cómo interactúan el sobrepeso y la insulina en el cuerpo.
El Papel de la Insulina y la Glucosa en el Cuerpo
La insulina es una hormona esencial para el metabolismo de la glucosa. Su función es “abrir las puertas” de las células para que la glucosa, derivada de los alimentos, pueda entrar y ser utilizada como fuente de energía. Cuando el cuerpo se vuelve resistente a la insulina, esta función se ve comprometida, lo que hace que la glucosa se acumule en la sangre. Con el tiempo, esta resistencia a la insulina puede dar lugar a niveles elevados de glucosa en sangre y, eventualmente, al diagnóstico de diabetes tipo 2.
¿Cómo Contribuye el Exceso de Grasa a la Resistencia a la Insulina?
El exceso de grasa corporal puede interferir con la función de la insulina de varias maneras:
- Almacenamiento de Grasa en Lugares no Ideales Normalmente, la grasa se almacena bajo la piel (grasa subcutánea) y se utiliza como reserva de energía. Sin embargo, cuando se acumula en exceso, la grasa puede comenzar a almacenarse en otros lugares, como el hígado y el páncreas. Cuando esto sucede, el páncreas puede verse afectado en su capacidad de producir insulina de manera adecuada. Esto se debe a que el almacenamiento de grasa en el páncreas y el hígado puede obstruir su funcionamiento y alterar los genes que regulan la producción de insulina, elevando el riesgo de resistencia a esta hormona.
- Influencia de los Factores Hormonales y Alimentación Las personas con sobrepeso u obesidad a menudo consumen dietas altas en calorías y bajas en nutrientes. Esta dieta puede provocar picos frecuentes en los niveles de glucosa en sangre, lo cual demanda mayor producción de insulina por parte del páncreas. Con el tiempo, esta sobrecarga en la producción de insulina puede hacer que el cuerpo desarrolle resistencia a ella, limitando su capacidad para controlar los niveles de glucosa en sangre.
- Distribución de la Grasa Corporal No toda la grasa corporal se almacena de la misma manera. El riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 es mayor cuando la grasa se acumula en el área abdominal, en comparación con cuando se distribuye en las caderas o los muslos. La grasa abdominal está asociada con una mayor producción de moléculas inflamatorias que pueden alterar la acción de la insulina, reduciendo su efectividad y aumentando la resistencia a esta hormona.
Conclusión. El sobrepeso, especialmente cuando implica acumulación de grasa en el abdomen y órganos como el hígado y el páncreas, está fuertemente relacionado con la resistencia a la insulina y, por ende, con el desarrollo de diabetes tipo 2. Aunque no todas las personas con sobrepeso desarrollarán diabetes, la relación entre ambas condiciones es clara y se debe principalmente a la interferencia que el exceso de grasa causa en el funcionamiento normal de la insulina.
Fuente: Quirónsalud. (s. f.). Diabetes y su relación con la obesidad. Objetivo peso saludable. Recuperado el 20 de noviembre de 2024, de https://www.quironsalud.com