Muchas personas piensan que el consumo de azúcar por sí solo es la causa de la diabetes, pero este es un tema con bastante confusión. La realidad es que el azúcar no es directamente responsable de la diabetes, aunque un consumo excesivo de alimentos con altos niveles de azúcar, junto con otros factores, puede aumentar el riesgo de desarrollar la enfermedad. Vamos a revisar qué factores realmente contribuyen a la aparición de la diabetes, especialmente en México.
Principales causas de la diabetes en México
- Hábitos alimenticios poco saludables
En México, los malos hábitos de alimentación son una de las principales causas de la diabetes tipo 2. Consumir demasiada azúcar refinada, grasas saturadas y alimentos con mucha sal puede alterar la salud metabólica del cuerpo. Aunque el azúcar en sí no causa diabetes, muchos alimentos con alto contenido de azúcar, como refrescos, frituras y comida chatarra, elevan la glucosa en la sangre y, con el tiempo, pueden contribuir a un riesgo mayor de desarrollar diabetes. - Resistencia a la insulina
El sobrepeso puede provocar resistencia a la insulina, es decir, cuando el cuerpo no responde correctamente a la insulina, la hormona que permite que la glucosa entre a las células para ser utilizada como energía. Esto hace que el nivel de azúcar en la sangre se mantenga alto y, con el tiempo, puede llevar a desarrollar diabetes tipo 2. Esta situación suele ser más común en personas con exceso de peso, aunque también puede aparecer en personas de peso normal. - Sobrepeso y obesidad
Aunque no todas las personas con sobrepeso o con obesidad desarrollan diabetes, el riesgo aumenta con el exceso de peso, especialmente en la diabetes tipo 2. El exceso de grasa puede afectar la forma en que el cuerpo utiliza la insulina, dificultando el proceso de control de glucosa en la sangre. La obesidad es, por tanto, un factor de riesgo importante, pero no el único. - Falta de actividad física
La inactividad física es otro factor importante. Cuando no se hace ejercicio, el cuerpo no quema suficiente energía, lo que puede contribuir al sobrepeso y a niveles altos de glucosa en sangre. El ejercicio, además, tiene un efecto positivo en la sensibilidad a la insulina, es decir, hace que el cuerpo responda mejor a esta hormona, ayudando a reducir los niveles de azúcar en sangre. La actividad física regular también ayuda a mantener en buen estado los músculos y favorece una mejor recuperación después del ejercicio. - Antecedentes familiares y genética
La diabetes tiene un componente genético, lo que significa que si hay casos en la familia, el riesgo de desarrollarla es más alto. Si uno de los padres tiene diabetes, el riesgo de que sus hijos la desarrollen es de alrededor del 40%; si ambos padres tienen diabetes, el riesgo sube a un 70%. Estos antecedentes familiares aumentan las posibilidades de desarrollar tanto la diabetes tipo 1 como la tipo 2.
En conclusión
La diabetes es una enfermedad con múltiples factores de riesgo, y aunque el consumo de azúcar en sí no es la causa directa, los hábitos alimenticios y de vida en general tienen un papel fundamental en el riesgo de desarrollarla. Adoptar un estilo de vida saludable, hacer ejercicio de manera regular y tener una dieta balanceada son las claves para reducir el riesgo.
Para personas que ya viven con diabetes, la tecnología de monitoreo de glucosa en tiempo real puede ser una gran herramienta. Por ejemplo, si alguien se ejercita después de comer, puede usar un monitor para ver cómo sube su glucosa y saber cuándo detenerse o consumir una merienda para mantener sus niveles estables. Así, el monitoreo continuo les permite tomar decisiones en el momento y evitar una caída o subida brusca de glucosa, manteniéndose seguros y con el control de su salud en sus manos.