Si hablamos de grandes logros deportivos, dos nombres nos vienen a la mente: Gary Hall Jr. y Sir Steve Redgrave, atletas olímpicos de altísimo rendimiento. Ambos son no solo deportistas de élite, sino también personas que viven con diabetes. Este diagnóstico no ha sido un obstáculo, sino parte de su camino a la cima. Hall, nadador estadounidense y múltiple medallista de oro, y Redgrave, remero británico y cinco veces campeón olímpico, lograron llegar al podio sin permitir que la diabetes les frenara. Ellos son una prueba viviente de que, con el monitoreo adecuado y siguiendo ciertos cuidados, cualquier persona diabética puede realizar ejercicio e incluso competir a nivel profesional.
¿Por Qué es Importante Medir la Glucosa Antes del Ejercicio?
Para cualquier persona, y especialmente para quienes viven con diabetes, es esencial monitorear la glucosa en sangre antes, durante y después de hacer ejercicio. Un nivel de glucosa adecuado evita los riesgos de desmayos, baja energía o complicaciones que podrían hacer peligrosa la actividad física. Aquí te explicamos las diferentes recomendaciones:
- Menos de 90 mg/dl: Si tus niveles están por debajo de este límite, puede ser peligroso realizar ejercicio. A estos niveles, el cuerpo podría quedarse sin suficiente “combustible” y llegar al agotamiento o una baja de glucosa. En este caso, es recomendable consumir un pequeño refrigerio antes de comenzar.
- Entre 126 mg/dl y 180 mg/dl: Este rango es ideal para la mayoría de los ejercicios. Sin embargo, recuerda que algunos ejercicios, como el levantamiento de pesas o el entrenamiento de intervalos de alta intensidad, podrían elevar tus niveles de glucosa en lugar de reducirlos.
- Entre 182 mg/dl y 270 mg/dl: A este nivel, puedes realizar actividad física de forma segura.
- Más de 270 mg/dl: Si tienes un nivel alto como este, conviene tomar precauciones. En estos casos, el ejercicio intenso podría hacer que la glucosa suba aún más, poniendo en riesgo tu salud.
Ejercicio y Monitoreo de la Glucosa en Diferentes Etapas
Antes del Ejercicio
Antes de comenzar cualquier actividad física, conocer tu nivel de glucosa es clave. Esto te permite decidir si necesitas ajustar tu ingesta de alimentos o realizar alguna corrección. Hoy en día, hay sensores y dispositivos de monitoreo continuo de glucosa que facilitan esta tarea y pueden ser una excelente herramienta para realizar un ejercicio seguro y productivo.
Durante el Ejercicio
El tipo de ejercicio que realices puede hacer que tus niveles de glucosa suban o bajen. Ejercicios como el levantamiento de pesas o aquellos de alta intensidad pueden elevar la glucosa, mientras que los ejercicios de resistencia, como el ciclismo o correr largas distancias, tienden a reducirla. Con un monitor de glucosa portátil o un sensor continuo, puedes revisar estos cambios de manera instantánea, algo que atletas como Gary Hall Jr. y Steve Redgrave probablemente hubieran apreciado en su época, ya que evita tener que detenerse para medir la glucosa de forma manual.
Después del Ejercicio
El monitoreo posterior al ejercicio ayuda a saber qué alimentos y cantidades son los ideales para apoyar la recuperación muscular. Si los niveles de glucosa bajaron demasiado, puedes optar por una comida rica en carbohidratos para equilibrarlos y recargar tu energía para el resto del día o tu próxima sesión de entrenamiento.
Ejemplos de Superación y el Uso de la Tecnología en el Monitoreo
La historia de Hall y Redgrave es un recordatorio de lo que el monitoreo y control de la glucosa pueden hacer. Cada uno de ellos debió aprender a controlar su condición de forma cuidadosa para rendir al máximo nivel y adaptarse a los cambios en su glucosa durante el entrenamiento y la competencia. Hoy en día, gracias a la tecnología de sensores de monitoreo continuo de glucosa, cualquier persona puede medir su glucosa sin interrupciones y ajustar su alimentación o esfuerzo sin tener que detenerse.
Conclusión
Gary Hall Jr. y Sir Steve Redgrave nos enseñan que, con monitoreo y disciplina, se puede alcanzar cualquier meta deportiva sin que la diabetes sea un obstáculo. Gracias a los avances tecnológicos, hoy en día podemos controlar la glucosa de manera más simple y precisa, permitiendo que cualquier persona viva con mayor seguridad y disfrute de los beneficios del ejercicio. Si tienes diabetes y estás comenzando tu camino en el ejercicio, no olvides que llevar un control adecuado de tu glucosa, con ayuda de tecnología moderna, es el primer paso para alcanzar el éxito deportivo y cuidar de tu salud.